JESUCRISTO NO FUE CRISTIANO

Los cristianos no reflexionan ni cuestionan, solo creen. Si hubieran nacido en Arabia serían musulmanes, si hubieran nacido en Asia serían budistas. Jesus no fue cristiano, fue judío y murió creyendo ser el mesías esperado por los judios, que aspiran dirigir, no solo a su pueblo elegido, también los designios de toda la humanidad. Me imagino que pensarán los patriotas de turno cuando se den cuenta de este singular detalle y sean capaces de concebir sus edificios religiosos sustituidos por sinagogas.

Fueron sus discípulos, y seguidores como Pablo de Tarso, los que impulsaron el cristianismo. Desde entonces han ido floreciendo abundantes ramificaciones que intentan agrupar distintos modos de interpretar la figura de Jesús y sus ideas, pero en mi opinión hay tantos cristos como cristianos, igual que se hace con cualquier idea original adaptandose al gusto de cada persona. De ahí la facilidad con la que se cree en Dioses, Jesucristos ó Mahomas, parecidos pero distintos y adaptados a la personalidad de cada creyente, sosteniendose incluso la creencia en un Jesus negro para la comunidad negra y un dios mujer para las feministas.

Innumerables cultos, hábitos, santos y virgenes se extienden como un extenso menú para adaptarse y satisfacer desde los más burdos hasta los más refinados gustos, para que nadie se quede fuera del convite, pero aunque la amalgama de creencias surgidas sea muy extensa no creo que llegada la esperada resurrección abrace Jesucristo ninguna de ellas, aunque sea lo esperado por todas. Los hay con un amor desmedido a su ciudad y sus fiestas, los llamados "capillitas" aquí en Sevilla con su famosa semana santa. Están tan convencidos de sus creencias que piensan que Jesús aceptaría de muy buena gana tal folclore y de tal manera que se haría hermano de alguna de las numerosas cofradías para salir como penitente y con una cruz a cuestas detrás de un paso.

Es fácil idealizar a muertos, santificarlos y arrodillarse ante sus representaciones en madera o piedra, pero imagino como le sentará a muchos de los que hoy se consideran apasionados seguidores de la figura de Jesucristo en caso de que resucitara y volviera a empuñar el látigo contra los mercaderes ó pronunciara aquellas frasecitas tan inoportunas relacionadas con el dinero de "al césar lo que es del César" o "dales todo a los pobres y sigueme". Como se dice por esta tierras tan marianas, una pompa de jabón duraría más que una persona con ideales tan impertinentes e inadecuados para los adoradores del dios don dinero. Ese sí que tiene poder y auténticos seguidores.

Los cristianos subordinan la razón a la fe, sin embargo, hasta el propio Jesús decía aquello de "la verdad os hará libres". Libres quizás de cristianismos absurdos para acercarse mínimamente y de una manera coherente a la idea original.

Creación Página: 05/01/22
Última actualización: 26/01/22

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